Cinco consejos para comprobar que un juguete es seguro
26 Diciembre 2014
La ilusión de los hijos frente a la preocupación de los padres en lo que respecta a los juguetes y los regalos navideños. Llegadas estas fechas es habitual ver noticias de cómo los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado han intervenido cierta cantidad de juguetes falsificados y/o poco seguros para determinadas edades. Por ello os mostramos a continuación cinco pautas a tener en cuenta antes de realizar la compra de un jueguete:
- Debe contener el distintivo “CE”, que indica que el fabricante o distribuidor ha cumplido con la normativa europea. Si el juguete no dispone de este distintivo, dicho objeto podría ser retirado del mercado. Los juguetes que no lleven el marcado CE podrán ir a ferias de muestras y exposiciones, si se identifica claramente que no cumplen la normativa y que no se comercializarán antes de adaptarse a la misma.
- Debe figurar la información del fabricante del juguete o de su distribuidor en la Unión Europea (domicilio y número de identificación).
- Además, en el etiquetado debe figurar la edad mínima para que dicho juguete pueda ser utilizado por los niños sin riesgo.
- El juguete debe disponer de instrucciones en castellano, en las que se debe indicar tanto su procedimiento de montaje como su uso recomendable, mantenimiento y seguridad. El juguete debe contener información sobre los riesgos de su uso también en castellano, así como la forma de evitar dichos riesgos. Si se tratara de un objeto de pequeño tamaño, toda esta información podrá ir en el envase, el etiquetado o el folleto que le contenga.
- Cuando se trata de juguetes para bebés, es recomendable tener en cuenta, además, esta serie de condiciones: El objeto no debe contar con elementos que el bebé pueda desmontar o trocear. Si se trata, por ejemplo, del clásico sonajero, este no debe tener terminaciones afiladas, ya que lo más recomendable es que sean lisas y redondeadas y no contener bolitas u otros elementos de pequeño tamaño.
Las autoridades competentes adoptarán todas las medidas necesarias para asegurar que los juguetes no puedan comercializarse si no cumplen los requisitos esenciales de seguridad. El hecho de llevar el marcado CE hace presumir que el producto cumple todas las exigencias de fabricación y seguridad.
En caso de que se detecte que un juguete es defectuoso, existe una red alerta que permitirá la circulación rápida de la información tanto en el ámbito de la administración pública, a nivel europeo, estatal, autonómico y local, como a nivel social y económico, entre lo agentes implicados o afectados. Esto dará lugar, en su caso, a la retirada del producto y/o a la subsanación de los defectos que le hacen inseguro.
Si conoces la existencia de un juguete defectuoso o inseguro, puedes denunciarlo acudiendo a la oficina de consumo más cercana a tu domicilio describiendo el producto (marca, modelo, lugar y fecha de adquisición, y tipo de problema que presenta) y aportando tus datos de contacto.
Una vez leídos estos cinco pequeños consejos, solo nos queda desearos que disfrutéis junto con vuestros seres queridos de todos estos artículos que ponen siempre una sonrisa en los más pequeños de cada casa.