Gracias a Legálitas, un cliente logra ejecutar la garantía de su coche y que la empresa vendedora se haga cargo de todas las reparaciones

A muchos de nosotros nos produce preocupación el tener que pasar por un taller mecánico, ya sea por una revisión rutinaria o por alguna reparación necesaria. El desconocimiento de los ciudadanos de a pie sobre temas de automóviles provoca que afrontemos este momento con miedo e incertidumbre, ya que el paso por el taller suele traer aparejado un desembolso económico a veces inesperado.

Además de la tensión que se vive durante la visita a un taller, el disgusto es aún mayor cuando el vehículo es recién comprado, como le pasó a Rubén*, cliente de Legálitas, que había adquirido un coche mediante una agencia de compraventa de vehículos de segunda mano.

Tras la compra, el coche comenzó a dar varios problemas a la vez, iluminándose las luces de varias averías, así como perdiendo fuerza mientras Rubén circulaba por la carretera.

Tras comprar el coche de segunda mano, este le empezó a dar problemas, lo que la abogada detectó como vicios ocultos

Así, no tuvo más remedio que llevarlo a un taller mecánico, donde se le hizo los diagnósticos pertinentes. Estando el coche en el taller, nuestro cliente decidió llamar a Legálitas, y la letrada Paula Lomas Serrato fue la encargada de asesorarlo, explicándole, en primer lugar, que el vehículo tenía vicios ocultos, y que se debía ejecutar la garantía, por lo que procedió a contactar con la empresa de venta de vehículos y a ejercer los derechos de nuestro cliente.

No obstante, por parte de la empresa de coches de segunda mano no estaba dispuesta a correr con los gastos, entrando en negociaciones con sus propios abogados, en un proceso complicado y por medio de métodos como escritos, burofaxes y conversaciones telefónicas para llegar a un acuerdo.

De esta manera, no fue un proceso fácil, pero gracias a la insistencia de la abogada Paula Lomas, que presionó una y otra vez en favor de Rubén, se consiguió que la parte contraria se nos informara que se iban hacer cargo de todos los problemas que el vehículo presentaba, en ejecución de la garantía.

Se le comunicó a Rubén esta respuesta favorable, que quedó muy agradecido con la noticia de que la empresa que le vendió el coche había aceptado, por fin,  correr con todos los gastos de la reparación.  

*El nombre de nuestro cliente ha sido cambiado para proteger su identidad.

#LegálitasCasosReales